Las materias electivas pueden servir para investigar intereses, introducir o perfeccionar habilidades o aclarar objetivos profesionales. Así que el primer paso clave consiste en hacer una lluvia de ideas con su hijo adolescente y preguntarle: «¿Qué te interesa aprender?»

En este primer paso, también querrán pensar en quién diseñará e impartirá cada asignatura optativa. Es posible que usted tenga las habilidades necesarias para desarrollar e impartir una materia optativa que a su hijo le gustaría tomar. Si no es así, puede ponerse en contacto con amigos, vecinos, familiares, compañeros de su co-op, socios y referencias para que le ayuden a identificar a las personas con las habilidades, el tiempo y la voluntad de contribuir a la educación de su hijo adolescente de esta manera. (¡A muchas personas les gusta tener la oportunidad de transmitir su experiencia!).

Al diseñar una materia electiva, es útil distinguir el nivel de destreza del curso: ¿su hijo aprenderá habilidades de nivel principiante, intermedio o avanzado? De este modo, tanto el maestro como el alumno tendrán expectativas razonables sobre lo que se aprenderá. Esto incentivará la paciencia para desarrollar destrezas de manera gradual y conseguir mayor satisfacción al final del curso.

Puede encontrar materiales y útiles escolares para las clases electivas de diversas formas, incluso algunas poco convencionales. Por ejemplo, podría ir a la biblioteca pública, a una tienda de manualidades, centros comunitarios, hospitales, estación de bomberos, unirse a una co-op, usar el internet, contactar a proveedores de materiales de construcción o a comerciantes o empresas locales, ver videos de formación o asistir a un programa de extensión, etc.

Bien, ahora le toca a usted: ¿cuáles son sus recursos o fuentes poco convencionales?

Por lo general, la mejor manera de determinar los créditos de una electiva diseñada por usted es registrar el número de horas que su hijo dedica al curso. Para simplificar el proceso, puede darle a su hijo un registro (digital o en papel) para que anote la fecha, los detalles y el tiempo de duración de cada actividad de la materia. Al final del curso, el total de las horas registradas en el cuaderno puede darle una buena idea de la cantidad de créditos por asignar. Para obtener excelentes consejos sobre cómo asignarle créditos a una materia electiva o a cualquier curso, haga clic aquí.

OJO: las materias electivas no se limitan al año académico regular, siéntase en la libertad de programarlas durante las vacaciones de verano u otros días de descanso escolar.

Por el bien de su hijo, asegúrese de que él comprenda, desde el principio del curso, cómo se evaluará el trabajo realizado. ¿Quiere repasar rápidamente cómo determinar su método de evaluación y cómo calificar efectivamente el trabajo de su hijo? Haga clic aquí.

Realice pruebas de aptitud profesional para identificar posibles trayectorias de carreras. Después, investigue los requisitos de educación o formación, entornos laborales, demanda geográfica y otros factores de esas carreras. Luego determine si cada carrera requiere un título universitario, un programa como aprendiz, una escuela de oficios o una escuela técnica. Además, considere la posibilidad de realizar observación de actividades laborales durante el verano, ya que ofrecen una visión más cercana de carreras específicas y pueden ayudar a aclarar si una carrera en particular es una buena opción.

Lea diversas obras literarias de artistas reconocidos o de un periodo artístico interesante; vea videos sobre grandes obras de arte; visite un museo de arte (excursión local o visita virtual en línea) y presente un informe oral, un proyecto o un trabajo sobre un artista en particular.

Trabaje con alguien que remodela habitaciones para aprender a enmarcar, construir paredes en seco, empastar paredes, colocar zócalos, hacer molduras, pintar, etc. También puede ayudar a remodelar una cocina o un baño para aprender las técnicas básicas de colocación de azulejos y fontanería.

Vea y grabe un par de episodios de un programa de cocina de un chef o panadero que le guste; seleccione algunas recetas para intentar hacerlas. Escriba una lista de compras, haga el súper y determine el contenido calórico de cada receta. Vuelva a ver las partes relevantes de los episodios y haga pausa en los videos para completar los distintos pasos de las recetas. Reúna a la familia para degustar y evalúe los resultados.