Cuando tenía tan solo 13 años, a Kattarina Leal, estudiante educada en casa, le salió un quiste en el brazo. Parecía un muñeco de nieve: un pequeño bulto en la parte superior y uno más grande debajo. Sus padres, Marisol Rodero y Ernesto Leal, la llevaron al dermatólogo para que se lo quitaran.
Al principio, el dermatólogo dijo que sería un proceso sencillo. Pero cuando comenzó el procedimiento y notó que el quiste era más grande de lo esperado, se dio cuenta que tendría que llevar a cabo una cirugía complicada.
«Me dijeron que podían cubrirme los ojos, pero les dije que quería ver todo», dijo Kattarina. Quería entender cada paso de la cirugía.
«Yo casi me desmayo cuando escuché que Kattarina iba a ver toda la cirugía», dijo Marisol. «Pero mi hija dijo: “¡Fue muy divertido!”».
Después de esta experiencia, Kattarina supo que quería ser dermatóloga.
Un verdadero amor por el aprendizaje
Este agosto, Kattarina comenzó su carrera en ciencia biomédica en la Universidad de Texas A&M en Corpus Christi, donde vive su familia. Su meta es especializarse en dermatología después de graduarse.
Ella dice que no estaría aquí si no fuera por la educación en casa. (Marisol y Ernesto han educado a sus cinco hijas en casa durante 18 años. Ambos son hispanos y siempre quisieron darles una educación bilingüe.)
«La educación en casa cultivó mi pasión por la medicina», dijo Kattarina. Recordó que el verano pasado, escribió un ensayo sobre su experiencia como estudiante de educación en casa para postularse a un programa de medicina organizado por la Universidad de Brown. Fue aceptada y tuvo la oportunidad de aprender sobre enfermedades degenerativas.
La educación en casa nutrió un verdadero amor por el aprendizaje para Kattarina. A diferencia de sus amigos que estudiaban en la escuela pública, Kattarina veía el aprendizaje como un gusto, no una obligación.
«La educación en casa me permitió tener mucho tiempo y flexibilidad para encontrar mis pasiones», dijo. «Los últimos dos años de secundaria, pude tomar clases de doble matriculación en ciencias y tener experiencias prácticas en los laboratorios de una universidad comunitaria. No habría podido hacer esto si no fuera por la educación en casa».
La exploración del proceso de solicitudes universitarias
El proceso de solicitud de Kattarina a la Universidad Texas A&M no fue fácil. «Estas cosas no se aprenden por osmosis; uno necesita una guía,» dijo Marisol.
Ella entiende que muchos padres pueden sentirse inseguros y temerosos de preparar a su adolescente educado en casa para la universidad. Admitió que ella misma ha sentido esos temores.
«Pero no tienes que tener todo el conocimiento ni todas las respuestas,» dijo Marisol. «Puedes buscar ayuda. Puedes encontrar a un experto en un tema específico o ver uno de los webinarios de HSLDA para secundaria… no estamos solos como educadores en casa. Todo se trata de encontrar recursos».
La importancia de una marca personal
Hay un consejo importante que Marisol y Kattarina desean compartir con padres y sus adolescentes educados en casa: enfocarse en actividades extracurriculares.
«Las universidades están interesadas principalmente en las actividades extracurriculares,» dijo Marisol. «Y cuando educas en casa, tienes suficiente tiempo para que tu adolescente haga pasantías, trabajo voluntario, programas como aprendiz, deportes, etc.»
Kattarina recomienda llevar un registro detallado de cada actividad extracurricular. «Encuentra tus pasiones, encuentra las actividades extracurriculares que te hacen único,» dijo. «Y lleva un registro de todo lo que haces. Todas esas experiencias son increíblemente valiosas.»
La flexibilidad de la educación en casa permitió a Kattarina explorar el arte y el voleibol, participar en el servicio comunitario, ayudar a Marisol a desarrollar lecciones de ciencia en video para el currículo católico bilingüe que fundó, Nobis Pacem, y participar en el Programa de Identificación de Talento de la Universidad de Baylor, que brinda a estudiantes preuniversitarios excepcionales la oportunidad de aprender sobre STEM y las humanidades. (Este programa fortaleció la solicitud de Kattarina al programa de honores de la Universidad Texas A&M).
«Siempre recomiendo hacerse miembro de HSLDA»
Al reflexionar sobre cómo preparó a Kattarina para la universidad, Marisol enfatizó la ayuda que recibió con la membresía de HSLDA.
«Tenía mis dudas y miedos, y estaba lista para inscribir a Kattarina en la secundaria pública para que un consejero la guiara en el proceso,» dijo Marisol. «Pero me dijeron que yo podía hacerlo.»
Ahora, Marisol tiene la oportunidad de extender el mismo ánimo a los padres que usan Nobis Pacem y que desean preparar a sus adolescentes para la universidad.
«Siempre, siempre les recomiendo hacerse miembro de HSLDA y ver todos los webinarios de secundaria,» dijo.
Marisol y Kattarina también mencionaron que asistir a conferencias también es una gran oportunidad para aprender de expertos y otras familias educadoras en casa.
«Es muy inspirador y motivador conocer a otros graduados de educación en casa», agregó Kattarina.
Así que, si está pensando en educar en casa a su adolescente durante la secundaria y prepararlo para la universidad... ¡sepa que puede hacerlo!
Si es miembro de HSLDA y no sabe por dónde comenzar, le recomendamos esta serie de artículos en español sobre cómo preparar a su adolescente para la universidad y esta serie de webinarios grabados en inglés sobre cómo preparar un expediente académico de secundaria: ¡un documento que su adolescente necesitará para la solicitud universitaria!