¿Así que está educando a su hijo de secundaria en casa y tiene algunas dudas sobre su futuro? Tal vez se esté preguntando «¿cómo preparo a mi hijo para la universidad?», «¿cómo apoyo a mi hijo a elegir una universidad entre tantas opciones?» o «¿cómo sé qué universidad es buena para mi hijo?»

Preparar a su hijo para la universidad es un proceso de varios años, así que tendrá tiempo de organizar todos los detalles. Por lo pronto, le compartimos cuatro cosas importantes que puede hacer durante la secundaria para preparar a su hijo para la universidad tras su graduación.

1. Haga un plan de cursos de preparación para la universidad

Para entusiasmar e involucrar a su hijo con la planificación, puede abordarla como un equipo: exploren sus intereses profesionales, hablen sobre las opciones de cursos a tomar y anoten un plan tentativo para los cuatro años de secundaria. (Los miembros de HSLDA pueden descargar y llenar esta plantilla en blanco de plan de secundaria de cuatro años).

Aquí tiene tres ejemplos comunes de planes de estudios para la preparación universitaria (con ejemplos de planes adjuntos al final de este artículo):

  • Promedio: un mínimo de 24 créditos por lo general.
  • Fuerte: aproximadamente de 26 a 28 créditos, con cursos de matemáticas y ciencias de nivel superior, así como cursos adicionales de ciencias sociales, historia e idiomas extranjeros.
  • Riguroso: 28 créditos o más, con cursos AP (Advanced Placement) y de matriculación doble, altamente recomendables.

Si bien no es un término técnico formal, la «solidez» del programa de secundaria de su estudiante depende de la cantidad de créditos obtenidos y el número de cursos avanzados realizados, incluidos los cursos de AP (Advanced Placement) y cursos de matriculación doble (tomados en un colegio comunitario local o a través de un programa de educación a distancia). Estos cursos avanzados son una buena manera de demostrar que su hijo está listo para la carga de trabajo de nivel universitario.

En todo programa de preparación para la universidad, el último año de secundaria debe constar de una carga completa de cursos de nivel superior. Las universidades consideran que el último año de secundaria es un buen indicador del nivel de preparación del estudiante, por lo que debe ser exigente a nivel académico.

Además, los cursos que forman parte de un plan de preparación para la universidad le ofrecen a su hijo mucho más que conocimiento académico: desarrollan técnicas de estudio, ética de trabajo independiente, capacidad de investigación y habilidades de gestión del tiempo, todas necesarias para el éxito en la universidad.

2. Considere cursos externos

Otra forma de fortalecer el programa de secundaria de su hijo y aumentar su atractivo para los oficiales de admisión universitaria es incorporar clases de fuentes externas y cursos evaluados por personas fuera de la familia. Como beneficio adicional, los instructores externos pueden proporcionar excelentes cartas de recomendación, que a menudo son necesarias durante el proceso de admisión.

Otros beneficios de las clases externas incluyen:

  • interacciones dentro de un entorno grupal,
  • exposición a diferentes estilos de enseñanza,
  • evaluación de calificaciones por un tercero,
  • desarrollo de habilidades para tomar notas,
  • cumplimiento de fechas límite para entregar trabajos,
  • crédito universitario para cursos de matriculación doble, y
  • desarrollo de habilidades de gestión del tiempo.

3. Explore intereses profesionales futuros

También podría considerar la posibilidad de invitar a su hijo a profundizar un poco más en su preparación universitaria a través de pruebas de interés profesional y oportunidades de observación de actividades laborales (job shadowing). Tener claridad sobre un posible camino profesional les ayudará a elegir cursos de secundaria que preparen a su hijo de la mejor manera para carreras universitarias relacionadas con su campo de interés.

Las materias electivas y las actividades extracurriculares también son excelentes formas de incorporar los intereses de su hijo en el plan de secundaria. Por ejemplo, si le interesa la informática, podría tomar una electiva en programación; si le interesa ser veterinario, podría participar como voluntario en un refugio de animales. Y si su hijo no está seguro de qué carrera seguir, las electivas y actividades extracurriculares aún son valiosas porque aportan variedad y enriquecen su perfil académico.

Recuerde que, de ser necesario, este plan general de cuatro años puede ajustarse para cumplir con los requisitos de admisión de universidades específicas.

4. Dé importancia a la lectura y la escritura

Si bien es importante que todo estudiante desarrolle habilidades de lectura y escritura, esto es aún más esencial para quienes planean ir a la universidad. Estas destrezas no solo ayudan durante el proceso de admisión, al mostrar que el estudiante puede comprender y expresar ideas complejas, sino que también son fundamentales en la universidad, donde muchos cursos dependen de la lectura y la redacción de ensayos y trabajos.

Un buen momento para que su hijo se sumerja a profundidad en la lectura de buenos textos literarios enriquecedores es entre el grado 9 y 10. Al leer clásicos y otros libros de calidad con frecuencia, su vocabulario y conocimiento pueden ampliarse significativamente.

También es crucial fortalecer las habilidades de escritura a lo largo de la secundaria, sin importar cuál sea la especialidad que su hijo elija. Escribir fomenta el pensamiento analítico, lógico, creativo y organizado, destrezas útiles en prácticamente cualquier profesión.

¡Ahora ya tiene algunas herramientas útiles para comenzar a preparar a su hijo para la universidad y su futuro! En realidad, la universidad es solo una de las muchas etapas en el camino de su hijo después de la secundaria. Todas las habilidades que está adquiriendo lo equiparán para una vida de aprendizaje continuo.