Esta es la pregunta que llevó a Elisabeth Jackson a convertirse en una autora con solo 7 años.
Una mañana, su mamá, Gyquetta, notó que Elisabeth tenía una sonrisa brillante en su rostro.
«Le dije que estaba sonriendo como un gato de Cheshire», dijo. «Pero a los 6 años, ella no sabía qué tipo de gato era este y preguntó: “Mamá, ¿por qué sonríe el gato de Cheshire?”».
Como cualquier otra mamá que educa en casa, Gyquetta pensó que esta era una gran oportunidad de aprendizaje, así que le devolvió la pregunta a Elisabeth, preguntándole por qué ella creía que el gato de Cheshire sonreía.
«Está agradecida… por eso está feliz», respondió Elisabeth. «Está agradecida por todas sus bendiciones, como la comida y los juguetes para jugar».
La respuesta de Elisabeth inspiró su proyecto de Artes del Lenguaje del grado 2, que culminó en la elaboración de un libro ilustrado que ella misma escribió y dibujó, llamado: Why Does the Cheshire Cat Grin? (¿Por qué sonríe el gato de Cheshire?). El libro trata sobre Chesshie el gato, que sabe que el secreto de la felicidad es tener una actitud de gratitud. Se inspira en valores cristianos e incluye versículos de la Biblia sobre el agradecimiento.
En camino a ser autora
Después de terminar de escribir e ilustrar su libro, Elisabeth se lo mostró a sus abuelos y amigos de la familia. Todos pensaron que era un libro «digno de tener un espacio en su librería favorita», dijo Gyquetta.
Así que Gyquetta investigó y decidió lanzar una agencia editorial para imprimir el libro. También contrató a un diseñador gráfico para que le enseñara a Elisabeth a formatear cada página del libro y darle una apariencia más formal. Para ella y su esposo era importante que Elisabeth participara en cada paso del proceso de publicación, ya que también era parte de su educación.
Durante el proceso, la familia se unió a un par de grupos de escritores que les conectaron con recursos adicionales y les ofrecieron apoyo y orientación en el camino.
Un grupo en particular invitó a Elisabeth a unirse a otros autores cristianos y compartir un stand en uno de los eventos anuales de educación en el hogar más grandes del país: The Southeast Homeschool Expo en Atlanta. Elisabeth se divirtió mucho conociendo a clientes, sonriendo para fotos en el stand y firmando y vendiendo copias de su libro.
Elisabeth en una librería apuntando a su propio libro.
Elisabeth también ha aceptado invitaciones como cuentacuentos en librerías populares, cafeterías, bibliotecas, ferias de jóvenes emprendedores y en un mercado comunitario. Generalmente lleva consigo una réplica de peluche del personaje de Chesshie el gato, que hizo durante su clase de costura el año pasado. Además, usa un juego de vestido y collar que también creó y cosió ella misma.
Durante su lectura, invita a la audiencia a cantar con ella y Chesshie, mientras toca la canción Jesus Loves Me! en violín. Puedes encontrar el libro de Elisabeth en librerías en todo el mundo y en el propio sitio web de Elisabeth: ChesshieTheCat.com
Cuando le pregunté a Elisabeth sobre lo que pensaba acerca de escribir y publicar su propio libro, me dijo: «Al principio, no creía que pudiera hacerlo, pero luego mi mamá me dijo que sí podía hacerlo, así que lo hice».
«Es importante ser agradecida», añadió. Al igual que Chesshie, se siente agradecida por tantas bendiciones en su vida.
Gyquetta y su esposo sabían que querían educar a Elisabeth en casa desde antes que naciera. Querían ser sus maestros más influyentes y educarla en su fe cristiana. Después de cuatro años de educación en el hogar, también han llegado a amar la libertad y flexibilidad que esta alternativa les brinda.
«Nos encanta poder adaptar el currículo y las actividades de Elisabeth mientras le mostramos que cada desafío es una oportunidad para crecer», dijo Gyquetta.
Platos únicos, viajes y pósteres del medio ambiente
Gyquetta y su esposo notaron los intereses y las pasiones específicas de Elisabeth desde temprana edad: la ciencia, el arte y la música. Y utilizaron la flexibilidad que brinda la educación en casa para adaptar su currículo y fomentar esos talentos.
Por ejemplo, a Elisabeth le gusta la jardinería y la cocina. Así que, en el grado 2, Gyquetta le asignó un proyecto: crear un plato único usando huevos y productos del jardín familiar. Esta idea se le ocurrió gracias a Kids Gardening, una organización que proporciona recursos educativos para que más niños aprendan a través de la jardinería. Toda la familia ayudó a Elisabeth a emprender el desafío.
Elisabeth preparando los barcos de calabacines.
«Recogió calabacines, fresas, pétalos de rosa y tomates “cherry” de nuestro jardín», dijo Gyquetta. «Y le ayudamos a cocinar huevos, barcos de calabacín a la parrilla con parmesano, brownies de calabacín con nueces y pastel de chocolate».
«¡Usamos los pétalos y las fresas para el relleno del pastel de chocolate!», dijo Elisabeth.
Elisabeth también participó en un concurso nacional organizado por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, en el que los participantes tenían que crear un póster que animara a las personas a cuidar la tierra plantando más árboles, reduciendo el uso de plásticos y utilizando gusanos para ayudar a descomponer plásticos.
El póster se titulaba «Elisabeth y los Guardianes Verdes». Los Guardianes Verdes—Poly Plásticos, Orie Orgánicos, Percy Contaminación, Rita Recicla y Trina Árboles—alentaban a las personas a cuidar la tierra de diferentes maneras. Elisabeth ganó un certificado de primer lugar en su rango de edad debido a la creatividad del póster.
La flexibilidad que proporciona la educación en el hogar también ha permitido que la familia de Gyquetta viaje por los Estados Unidos y explore diferentes lugares, mientras cultiva un aprecio por distintos pueblos y sus respectivas culturas.
La familia Jackson en su reciente viaje a Hawái.
Cuando se le preguntó cuál sería su próximo destino, Elisabeth dijo que le encantaría ir a México, Australia y Grecia, entre otros países.
Amor por el aprendizaje
Además de escribir e ilustrar, a Elisabeth también le gustan los experimentos científicos, hacer slime, diseccionar cosas, crear su propia colección de joyas y diseñar y coser los vestidos más elegantes que puede imaginar para sus muñecas Barbie, para ella misma, e incluso, para Chesshie.
«Mi esposo y yo nos sentimos increíblemente bendecidos de poder ver a Elisabeth recorrer los caminos de la vida y ver su amor por el aprendizaje florecer ante nuestros ojos», dijo Gyquetta.
Descubrimiento de una comunidad de apoyo
Gyquetta y Elisabeth están felices de haber encontrado una comunidad de apoyo en DeKalb Christian Home Educators (DCHE), un grupo de apoyo para la educación en el hogar en Georgia que se fundó en 1989 y que ofrece todo tipo de clases, actividades y excursiones para niños educados en casa.
Conforme a Gyquetta, estar involucrada con DCHE ha sido «excepcionalmente enriquecedor» ya que ha ofrecido a su familia excursiones memorables y actividades extracurriculares, desde artes marciales e instrucción en piano hasta concursos bíblicos. El año pasado, Elisabeth ganó el primer lugar en el concurso de ortografía para alumnos de su edad de DCHE.
Sobre todo, «Elisabeth ha encontrado un lugar de amistad entre un grupo de compañeros que también están creciendo en la fe», dijo Gyquetta.
«¡Es divertido!», dijo Elisabeth, refiriéndose al tiempo que pasa en el grupo.
Cada año, DCHE co-organiza la conferencia Flourish: Homeschool Conference junto con Georgia Black Home Educators Network (GBHEN). Esta conferencia tiene como objetivo conectar a las familias que educan en el hogar con recursos y capacitación para que puedan educar con éxito a sus hijos y prepararlos para sus carreras.
En enero de 2024, DCHE y GBHEN organizaron la conferencia de Flourish más reciente y fue especialmente alentadora para Gyquetta, su esposo y Elisabeth.
«A Elisabeth la invitaron a dar una presentación de su libro a un grupo de los asistentes más jóvenes», dijo Gyquetta. «Mi esposo se sintió inspirado al escuchar un panel de esposos y padres con experiencia en la educación en casa y yo sentí mucho ánimo al conocer a esposas y madres con experiencia que compartieron generosamente su sabiduría».
Gyquetta quedó especialmente impresionada con la abundancia de conocimientos compartidos por tres representantes de HSLDA: LaNissir James, coordinadora de alcance afroamericano, Natalie Mack, coordinadora de alcance a la comunidad militar, y Rochelle Matthews-Somerville, especialista en necesidades educativas especiales. Gyquetta ha sido miembro de HSLDA durante cuatro años y estaba agradecida de que mostraran su compromiso con la comunidad de la educación en el hogar en Flourish.
«Nos animaron no desistir y perseverar. Y nos recordaron que los sacrificios valen la pena», dijo.
Gyquetta y su esposo tienen grandes esperanzas para el brillante futuro de Elisabeth en la educación en casa y más allá. Y se sienten bendecidos de no estar solos en su recorrido. En cuanto a Elisabeth, ella ya se encuentra escribiendo su segundo libro, una historia que comenzó a idear hace más de tres años protagonizada por personajes originales inspirados en su familia.