Susana había estado sufriendo acoso escolar por parte de sus compañeros desde que comenzó el grado 6 en una escuela pública en Nebraska en 2019.
«La acosaban por su acento cubano y la presionaban a hacer cosas que no quería hacer», dijo Adianez, la madre de Susana.
El acoso empeoró y cerca del final del año, Susana fue atacada físicamente por una de sus compañeras. Según su madre, el rostro de Susana quedó desfigurado después del ataque, casi irreconocible.
«Toda nuestra experiencia con la escuela pública fue horrible", dijo Adianez. «Yo les di a mi hija para que me la cuiden, pero salió dañada y traumatizada».
Susana sentía tanta angustia que no quería volver a estar cerca de su agresora. Por ello, en el grado 7, la colocaron en un salón distinto al de la compañera que la agredió. Pero con la llegada del COVID-19 y el inicio de las clases en línea, Susana fue asignada al mismo salón virtual que su acosadora. Susana se rehusaba a encender su cámara.
Luego, cuando las clases presenciales se reanudaron en su escuela en 2022, la acosadora de Susana le mandó mensajes amenazantes, diciéndole que la estaría esperando en la escuela. Por lo mismo, Susana se negaba a regresar.
«No podíamos mencionar la palabra “escuela” porque le daba pánico», dijo su madre.
«Estaba fascinada»
Adianez comenzó a considerar otras opciones educativas para su familia. Sabía que sería ideal para su hija, así como para ella misma y sus problemas de salud.
Desde hace un par de años, Adianez padece de diabetes y fibromas uterinos. Además, sufrió un ataque cardíaco hace unos años; y al contraer COVID-19 en 2023, sufrió de un preinfarto cerebral.
Por otro lado, Susana y su hermano Enrique, de 11 años, han sido diagnosticados con trastorno del espectro autista. Además, a Susana también le diagnosticaron con trastorno afectivo episódico y ansiedad; y a Enrique, trastorno de control de impulsos. Por lo mismo, Adianez había estado luchando para lograr que Susana y Enrique recibieran el apoyo especializado que necesitaban de parte de sus escuelas.
Al empezar a buscar otras opciones educativas, Susana entendió que la educación en el hogar podría ser una buena alternativa: no más acoso escolar, un entorno positivo para ayudar a Susana y a Enrique con sus necesidades especiales y reducción de la exposición a gérmenes que podrían desencadenar más problemas de salud.
Pero cuando Adianez habló sobre la idea de la educación en casa con la directora de educación especial del distrito, ella le dijo que la educación en el hogar no existía en Nebraska.
Con todos estos factores en mente: acoso escolar, desafíos de necesidades especiales y complicaciones de salud, Adianez comenzó a investigar en línea sobre opciones educativas alternas para sus hijos.
Encontró un sitio en español sobre educación en casa llamado Vida Homeschool y empezó a aprender todo sobre la educación en el hogar.
«Estaba fascinada», dijo.
Luego vio un video de este sitio en el que salía la coordinadora de alcance hispano de HSLDA, Karim Morato, y aprendió más sobre HSLDA. Se convirtió en miembro en junio de 2022.
Poco después, contacto a nuestro equipo para solicitar apoyo legal. El equipo de Kevin Boden, abogado de HSLDA, le aseguró que sí podía educar en el hogar en Nebraska. Entonces, en agosto de 2022, ella completo la documentación requerida y la presento al Departamento de Educación de Nebraska.
Tras recibir una respuesta negativa, le dijo al distrito: «No estoy pidiendo permiso. Solo se lo estoy notificando. Si hay algún problema, hable con mis abogados».
Después de eso, comenzó a educar a Susana y a Enrique en casa.
«Los cielos abiertos»
Ha transcurrido ya un año y medio desde que comenzaron a educar en casa. Adianez y su esposo, Enrique, se sienten bendecidos por haber encontrado esta alternativa educativa. Adianez hubiera deseado descubrir la educación en casa antes, para evitar que Susana sufriera agresiones físicas y para satisfacer las necesidades educativas especiales de sus hijos.
Susana y Enrique también se sienten más tranquilos porque han podido aprender a su propio ritmo.
Hoy en día, Susana está cursando el grado 11 y no se frustra tan fácilmente durante su proceso de aprendizaje. Le encanta pintar y modelar barro. Enrique, por otro lado, está en el grado 6 y le gusta aprender en casa con su mamá.
A Adianez le encanta enseñar a sus hijos sobre la historia de la Segunda Guerra Mundial, principalmente porque el abuelo de los niños, Domingo Coll, sirvió durante ese conflicto. Adianez y su esposo están muy orgullosos de ello y atesoran todos los documentos y recuerdos que tienen de él.
Su familia también está agradecida por la flexibilidad que la educación en el hogar les ha brindado en medio de los problemas de salud de Adianez. Desde que empezaron a educar en el hogar, Adianez se siente mucho más tranquila, sabiendo que las posibilidades de sufrir otro preinfarto cerebral por exposición a gérmenes son más limitadas.
«La educación en el hogar fueron los cielos abiertos para nosotros», dijo Adianez. «Cada vez que conozco a alguien nuevo, les hablo sobre las maravillas de la educación en el hogar».
«HSLDA es como mi familia»
Adianez está especialmente agradecida por el apoyo de HSLDA. En los últimos dos años, su familia ha recibido dos Becas de Currículo de HSLDA Compassion. Esto posibilitó que ella y su esposo compraran equipos electrónicos, útiles escolares, libros y una impresora para educar a sus hijos en casa.
«Es importante que nuestros hijos sientan que pueden aprender en casa», dijo Adianez.
Adianez también se siente agradecida por haber recibido apoyo en español de la administradora bilingüe de becas de HSLDA, Amy Majors, y la representante bilingüe de membresía de HSLDA, Marilú Herrera. También expresó su gratitud hacia nuestras asesoras de necesidades especiales, la Dra. Rochelle Mathews-Sommerville y Marialena Zachariah, por ayudarla a elegir un currículo de necesidades educativas especiales y crear un Plan de Educación Estudiantil para satisfacer las necesidades de Susana y Enrique.