Hace tres años, desde la sala de su hogar en Miami, Marissa Castiblanco, mamá educadora en casa, lanzó una cuenta de Instagram para responder a una necesidad creciente en la comunidad hispana.

«Noté que había una falta de información en esta comunidad y a mí me apasionaba hablar sobre la educación en el hogar y compartir consejos», cuenta Marissa.

Esa pasión dio origen a @mifamiliahomeschool, un espacio digital con más de 26,000 seguidores alrededor del mundo. Aunque no es una cifra alta comparada con la de los influencers más populares, para Marissa cada seguidor representa algo más grande: un movimiento hispano de educación en casa que sigue creciendo.

«Me ha sorprendido la cantidad de países donde las personas están educando en el hogar», dijo. «Familias de Chile, Argentina, México y España me escriben, incluso mamás que viven en pueblos rurales y me cuentan que han encontrado una comunidad gracias a mi cuenta».

Un llamado más profundo

Marissa nació en Kansas, pero su familia se mudó a México por el trabajo misionero de sus padres cuando ella tenía 13 años. En aquel entonces, su mamá le ofreció educarla en casa, pero ella no quiso.

«Le dije a mi mamá que no quería ser una niña ‘rara’ educada en casa», dijo Marissa, reconociendo que en ese entonces había caído en un estereotipo común de los niños educados en casa. 

En cambio, asistió a una escuela privada en México, donde aprendió español antes de graduarse de la secundaria. Después, mientras asistía a una universidad bíblica en Tulsa, Oklahoma, conoció a su esposo William, originario de Colombia. Al terminar sus estudios, se casaron y tuvieron a su primera hija Abi mientras vivían en Oklahoma.

Durante ese tiempo, Marissa trabajó en educación infantil, pero después se mudó a Miami para apoyar una iglesia local, y ahí fue cuando comenzó a cimentarse el deseo de quedarse en casa y educar a su hija.

Marissa y sus tres hijas: bebé Orli (arriba), Elli (izquierda) y Abi (derecha). 

«Empecé enseñándole el alfabeto y los sonidos de las letras a Abi, actividades muy simples al principio», recuerda. «Disfrutaba muchísimo pasar ese tiempo con ella y quería enseñarle aún más».

Comenzó a buscar oportunidades educativas accesibles para su hija y fue entonces cuando encontró un grupo de apoyo local de educación en casa. Abi tenía apenas 3 años, pero esa experiencia despertó algo más profundo en Marissa.

«Ahí fue cuando me di cuenta de que otras mamás hispanas también estaban educando en casa».

A través del grupo, Marissa descubrió el libro The Call of the Wild and Free de Ainsley Arment, el cual transformó su visión sobre la educación en casa.

«Me ayudó a entender que educar en casa no es solo lo académico. Es preservar la infancia, fomentar la curiosidad y crear un estilo de vida basado en el aprendizaje».

A medida que Marissa seguía investigando y viendo videos sobre la vida de familias educadoras en casa, sentía un llamado más fuerte. Y en cuestión de meses, ella y William decidieron educar oficialmente en casa. Así comenzó su camino, hace dos años y medio.

Hoy en día, Abi (7), Elli (4) y la bebé Orli disfrutan del ritmo de la enseñanza en casa. La rutina familiar incluye clases en grupo, estudios basados en la fe y actividades extracurriculares divertidas, como clases de surf y ciencia.

Un reel a la vez

El enfoque de Marissa como influencer de educación en casa en Instagram es ofrecer información práctica a familias hispanas sobre cómo educar en el hogar y construir una comunidad.

«Constantemente me preguntan por dónde empezar y cuáles son los requisitos legales», explicó. «Siempre los envío a la página de HSLDA. Es el recurso más confiable que conozco». 

Al principio, Marissa tenía dos cuentas de Instagram, una en inglés y otra en español; pero rápidamente observó que había mayor necesidad en la comunidad hispanohablante.

Su estrategia de contenido incluye reels educativos sobre cómo educar en casa, consejos sobre currículos, historias del día a día y mensajes de ánimo. William juega un papel muy importante detrás de cámaras.

«Él es el creativo, las mejores ideas salen de su cabeza», compartió Marissa. «Ve contenido sobre homeschooling, me manda videos, ¡e incluso lleva a las niñas a fútbol los sábados para que yo pueda grabar!».

Juntos también lanzaron un pódcast semanal donde hablan sobre la crianza, la educación en casa y la enseñanza bilingüe.

Marissa y William y sus tres hijas.

Una educación en casa bilingüe

Una de las preguntas que Marissa recibe con más frecuencia es cómo enseñar en dos idiomas, inglés y español. Para la enseñanza en español, sus recursos favoritos incluyen el currículo del Sistema Educativo LAM y el programa Llamitas Spanish Homeschool Curriculum. También usan libros de Colombia y otros materiales bilingües que han recopilado a lo largo de los años.

Sus hijas crecen en sus conocimientos y habilidades en este ambiente bilingüe. Abi ama leer, construir y pasar tiempo con sus amigas. Elli, por su parte, es la futura arquitecta de la familia: siempre está creando y cantando. Y la bebé Orli no se queda atrás y sigue los pasos de sus hermanas, observando y aprendiendo cada día.

El alcance digital de Marissa ayuda a cerrar la brecha para aquellas familias que se sienten solas o no saben por dónde comenzar. Ya sea una mamá en un pueblo pequeño de México o un papá en Argentina que quiere entender los requisitos legales, su plataforma ofrece ayuda práctica y ánimo sincero. Con paciencia y compromiso, Marissa ha logrado construir una comunidad solida que acompaña y fortalece a familias hispanas en la educación en el hogar, sin importar donde se encuentren.

«Nunca imaginé que esta cuenta se convertiría en una comunidad, pero me siento muy agradecida de que así haya sido», concluyó. «Quiero que cada familia hispana sepa que no está sola en este camino».